Como sabéis, el equipo de Fresh Imports está formado por un grupo de personas que llevamos el motorsport como estilo de vida. En esta ocasión Xavi se desplazó hasta la provincia de Tarragona para ver un trackday en Calafat, en el que por cierto hubieron máquinas que te dejaban sin aliento, literalmente.
Trackday en Calafat. Las tandas en España empiezan a levantar cabeza
No es ninguna novedad, recuerdo cuando hace unos años, tan si quiera rozaba la mayoría de edad, pero aún y así ya era asiduo a los circuitos en los que los fines de semana acudían esos quemados con los que yo me identificaba a pesar de no poder compartir en pista esos momentos. Desde fuera veía coches increíbles en los que mucha gente invierte grandes sumas de dinero, tiempo y sobre todo esfuerzo. Hablamos de algunos coches que recién salidos del concesionario alcanzaban la friolera de más de 60.000 euros y que allí estaban, cumpliendo su cometido. Exprimiendo toda la potencia en pista.
Os parecerá increíble pero el nivel, a pesar de la crisis que ha azotado y sigue azotando nuestro país, no ha descendido, si no que más bien ha hecho lo contrario.
Está claro que no todo el mundo tiene un poder adquisitivo altísimo para construirse su propia máquina definitiva para los trackday, pero también es cierto que cualquier coche es válido para correr si tienes las suficientes pelotas para hacerlo ir rápido. Con esto no queremos decir que los coches de estas características no lleven suficiente dinero invertido, sino más bien lo contrario. Todas las personas que entran a correr con cualquier coche a un circuito merecen mis respetos. Muchas veces suelen ser los coches que se utilizan a diario, con los riesgos que esto conlleva, y a parte, el gasto. Gasolina, neumáticos, frenos, aceite, filtros… Un sin fin de consumibles que muchas veces alcanza la cifras con dos o tres ceros.
En otras ocasiones los coches que compiten ni están matriculados para calle. Es el caso de los conocidísimos Speed Cars. Son unas barquetas muy ligeras con una dirección muy directa y con motores de 4 cilindros capaces de sobrepasar con creces las 10.000 RPM. Provienen de motos japonesas de grandes cilindradas y es lo más parecido a un Kart carrozado. ¡Toda una descarga de adrenalina el ir sentado en el suelo a más de 180 km/h!
Como sabéis quien os escribe es todo un amante de los hot hatch, esos coches pequeños con motores muy potentes capaces de sonrojar a coches aparentemente mejores en cuanto a prestaciones se refiere. Los Abarth 500 son los mejores ejemplos de hot hatch ¡Son unos devoradores de segundos ante el crono!
Claro que depende que coches grandes son irresistibles. En este caso el Alfa 156 GTA es un lobo con piel de cordero. Hablan de lo delicados que son, o que si se rompen o historias de estas, pero si los pruebas, aseguramos que enamoran. El motor 3.2 V6 conocido como Busso es una delicia para los oídos y ver como la aguja del cuentavueltas sube sin parar es una razón más para llevar una sonrisa de oreja a oreja.
Lo que os decíamos. Como dijo el personaje Toretto en Fast & Furious 7, “No hay nada más triste que ver a una bestia enjaulada” y creo que tiene más razón que un santo. ¿Qué motivo te lleva a comprarte un coche deportivo con más de 300 cv si no los utilizas nunca como es debido? ¡En este caso el propietario de este BMW M2 si sabe como divertirse!
No hay nada más bonito que ver unas cuantas generaciones de la misma marca alineados entre ellos. La simplicidad del CRX con su potente 1.6 16V de 130 cv ha servido para que Honda evolucione hasta el nuevo Civic Type R, pasando por el coqueto hibrido bautizado como CR-Z.
Para muchos en un trackday lo ideal es un coche de tracción trasera, pero hay dos vertientes… ¿Motor trasero o motor delantero? Vosotros elegís….
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